
Andalucía actualiza el impuesto de sucesiones
11 agosto, 2016
Una ‘notaría virtual’ para almacenar con total seguridad todos los documentos
14 septiembre, 2016Javier Misas expone procedimientos jurídicos útiles para ceder la gestión de nuestro patrimonio en momentos complicados
Somos conscientes que la expectativas de vida, con los avances médicos, se ha casi duplicado en los últimos cien años. Pero no sabemos si esta prórroga de vida la vamos a tener con la calidad física e intelectual que desearíamos.
Enfermedades como el alzheimer, el parkinson, vasculares y otras que todos tenemos en mente o cercanas nos hace reflexionar de cómo tenemos que ordenar nuestro patrimonio para afrontar la posible pérdida de capacidad.
Claro que ya estaba previsto por el legislador que en caso de incapacidad de una persona el Juez nombraba un tutor, pero el legislador ha dado pasos importantes para que seamos nosotros quienes ordenemos nuestra vida en caso de incapacidad a través de tres figuras jurídicas muy relacionadas entre sí:
– 1.- El Poder preventivo.
– 2.- Las instrucciones previas o voluntades anticipadas.
– 3.- La Autotutela.
No están muy desarrolladas legislativamente por eso somos nosotros (los ciudadanos, abogados, notarios) los que llevan a darles contenido a esa tres figuras.
1.a- El Poder preventivo: Consiste en un poder que una persona, encontrándose todavía con sus facultades mentales integras o a quien se le han diagnosticado una enfermedad degenerativa y ante la posibilidad de que en caso de incapacidad se produzca una situación de bloqueo de carácter patrimonial y sin necesidad de acudir a la incapacitación y tutela judicial, da a favor de otra persona (su esposa, sus hijos o una tercera persona) con facultades que subsistan para el caso de la incapacidad de quien lo otorga.
Puede ser un poder preventivo en sentido estricto, es decir que el apoderado sólo puede actuar desde el momento en el que el representante (quien da el poder) sufra el estado de incapacidad previsto en el apoderamiento.
Ejemplo: el poderdante dice que el apoderado sólo podrá actuar por perdida sobrevenida de capacidad del poderdante y no antes, que se deberá acreditar con Certificado Médico o/ dejando al apoderado libremente dicha apreciación de incapacidad/ o cuando haya sido declarado incapacitado judicialmente. Me inclino por las dos primeras porque este poder está basado en la confianza con el o los apoderados y en dar agilidad ante estas situaciones extremas.
1.b.- Apoderamiento con efectos desde ya, desde el momento de su otorgamiento sin esperar a que el poderdante sufra ningún tipo de incapacidad.
¿Y qué facultades le damos al apoderado? Las que usted quiera. Mi recomendación: acuda usted a su Notario, enciérrese con el sólo en su despacho, sin acompañantes (entiéndase los futuros apoderados). A lo mejor le enseña un modelo de poder general (llamado de ruina o de camiseta) con facultades, para usted, peligrosas, inservibles o desconocidas. Pídale que le haga un traje a medida. Las facultades que usted vaya a necesitar, nada más. Y nada de avalar, donar, o ridículas como hacer protestas de avería.
Puede ser para administrar sus bienes, aceptar o repudiar herencias, dar poderes a favor de Abogados y procuradores con facultades ante los Tribunales, vender una determinada finca, una cuenta del banco, …
2.- Instrucciones previas o voluntades anticipadas.-
Y si usted se anima, pues 3 * 1. Pueda aprovechar para hacer declaración de voluntad para que apoderado pueda intervenir que cualesquiera actos médicos quirúrgicos o sanitarios, solicitando y recibiendo información ,sobre donación o no-donación de órganos, para decir que en caso de padecer una enfermedad crónica, terminal o que le origine una situación vegetativa irreversible no se le mantenga en vida por medio de tratamientos extraordinarios o desproporcionados, que no se le prolongue irracionalmente su proceso de muerte, que se le administre el tratamiento adecuado para paliar el dolor. Representación ante médicos, hospitales, residencias asistenciales. Que se le interne o No en una residencia ….
3.- Autotutela.- Y si se sigue animando y ya que ha vencido el miedo al Notario y al poder, por qué no nombrar un TUTOR y en su caso CURADOR de sus persona y bienes?.